viernes, 18 de enero de 2008

PARTES DE UN TODO 5

Cansado como todos, seguía avanzado paso a paso por aquellos límpidos caminos, los que a pesar de ser nuevos, eran más estrechos y desprovistos, más planos y vacíos, que los recorridos durante su infancia.
No sólo sospechaba del avance frenético del progreso, sino también de la distancia del tiempo, ya que sus recuerdos eran una mezcla de promesas incumplidas y deseos agobiantes.
Al darse cuenta que su memoria no estaba siendo honesta, vociferó como un loco que la suya era una reflexión inútil, sin sentido, digna de ser abandonada al borde de la ruta, tal como los otros se desprendían de sus basuras.
Irremediablemente, a pocos kilómetros de allí, su caminata firme y decidida terminaría siendo tan sólo un deambular caprichoso.